28.4.06

Me como mi sombrero...


Es increíble como la pasión determina las decisiones que tomo en mi vida... la pasión por la literatura, el dibujo, mis juegos... y por supuesto las mujeres. Por la pasión he cometido errores y aciertos, sentir la pasión es el leit motif. Si no siento me muero, prefiero hundirme que flotar vacío.

Una a una, las decisiones cerebrales que incluyen las palabras claves del absolutismo (siempre, nunca, todo, nada), me las he tenido que tragar por culpa de la pasión, es una suerte que mi orgullo no se interponga en el sentir.

"Siempre voy a ser así, nunca voy a hacer esto, todo seguirá asi, nada cambiará mi posición" son la sarta de patrañas más grande del mundo. Aunque la pasión tenga cierta cuota de inmediatez irresponsable prefiero vivirla, aunque suene adolescentoide, cosa que ya no soy, al contrario de la rigidez del cerebro.

Mi cerebro surfea los canales de la pasión, aprende de ellos y principalmente disfruta, dejarse arrastrar por la pasión es lejos mejor que ciertas cosas que dije que nunca iba a probar, pero igual probé.

Hay un montón de gente que le molesta que sea así, que parezca que no me importa nada... la verdad las cosas me importan, el punto es que cuando me dejo llevar estoy dispuesto a pagar el precio, no le temo a ninguna de las consecuencias sociales o físicas de hacer lo que quiero. Si no te gusta... pues una lástima.

La pasión no es lo mismo que el deseo, el deseo es aún más inmediato... si vivo en el deseo constante, probablemente me pudra... el efecto de satisfacción no es duradero... el deseo quita, la pasión otorga. Una vez que el objeto del deseo se consigue, se busca el siguiente.

Malditas mujeres que te hacen pensar...

1 comentario:

armadillo dijo...

Mi pasión es adorar a las mujeres sin sentirlas, sin tocarlas, mi pasión es querer adentrarme con ellas y no hacerlo, es como verlas desde el punto mas alto y observarlas desde ahi.
La pasión de un astronomo es ver las estrellas desde su telescopio, eso es su motivo para vivir aunque no pueda tocarlas. Se perdería su pasión si pudiera llegar a una estrella, caería en la monotonía.
La pasión de un genetista es dislumbrar los secretos de la formación de una especie de animal o vegetal agitando vasos de precipitados y probetas sin tener el control absoluto de lo que tiene en sus manos, esa es su pasión y desaparecería si se concentrara en un sólo gen.
Mi pasión es ver a las mujeres y no perderme en un ade ellas por que caería en la monotonía.